Los tanques de almacenamiento son indispensables para innumerables industrias, ya que proporcionan la infraestructura que los gestiona y almacena, ya sean líquidos (agua, petróleo), gases o materiales sólidos. Los tipos principales son tanques sobre el suelo, tanques subterráneos y tanques atmosféricos, cada uno con características únicas.
Tanques sobre el suelo: Los tanques sobre el suelo son estructuras muy visibles y, a menudo, se utilizan en campos como entornos industriales donde es necesario monitorearlos o acceder a ellos fácilmente. Estos tanques están diseñados para soportar diferentes tipos de clima y pueden estar fabricados de acero robusto o fibra de vidrio resistente.
Tanques subterráneos: los tanques subterráneos, a diferencia de los aéreos, están ocultos bajo la superficie de la tierra, lo que los hace visualmente no intrusivos. Este tipo de tanque de agua ofrece protección contra una variedad de condiciones climáticas y bajo vandalismo, lo que hace que sea una opción en determinadas zonas.
¿Qué son los tanques atmosféricos? Estos tanques funcionan con una presión nominal cercana a la que permite el vapor del aire y otros gases, por lo que tienden a no volatilizarse, por lo que estos tanques de contención reforzada, de lo contrario, los líquidos volátiles en forma líquida pueden mantenerse a temperatura ambiente. Cumplen una función importante para conservar agua o combustible. Estos tanques tienen muchos propósitos en diferentes industrias, ya que son únicos en diseño y rendimiento.
Elegir el tanque de almacenamiento adecuado es una decisión importante que depende de numerosos factores, incluido lo que se almacena, las condiciones específicas del sitio, los mandatos regulatorios y las limitaciones de costos. Por ejemplo, las refinerías de petróleo pueden preferir tanques sobre el suelo debido a sus grandes volúmenes de producto y requisitos de inspección, mientras que en las zonas residenciales, los tanques subterráneos suelen ser más populares por razones estéticas y para conservar espacio.
Cada uno de estos tipos de tanques ofrece una amplia gama de opciones de diseño para satisfacer todo tipo de requisitos. Estos tanques pueden ser de pared simple o doble, verticales y horizontales; algunos ofrecen funcionalidades adicionales como techos flotantes para evitar la evaporación. Los tanques subterráneos también están equipados con equipos de detección de fugas y protección contra la corrosión, lo que demuestra el alto nivel de tecnología en estas instalaciones de almacenamiento.
Esto es particularmente importante cuando se trabaja con materiales peligrosos y debemos cumplir con las regulaciones federales como las establecidas por OSHA y EPA. Los tanques subterráneos, por otro lado, requerirán funciones de detección de fugas para detectar fugas antes de que lleguen al medio ambiente.
Hay algunos tanques fabricados por los fabricantes con características ecológicas. Si bien se pueden agregar paneles solares a los tanques sobre el suelo para lograr eficiencia energética, los materiales verdes para techos, como césped u otras plantas, también pueden cubrir algunos de nuestros estilos subterráneos en un esfuerzo por combinar perfectamente el tanque con su entorno. Los sistemas de recolección de agua de lluvia TC-1000STC y HRS Kiwa para tal fin se pueden utilizar agua para apoyar la conservación de los tanques atmosféricos.
Conclusión Los tanques de almacenamiento muestran la creatividad para satisfacer todo tipo de problemas o necesidades de almacenamiento de los humanos. Conocer las diferencias entre tanques aéreos, subterráneos y atmosféricos, además de tener en cuenta consideraciones como las necesidades individuales, los mandatos de seguridad, la flexibilidad del diseño y la huella ambiental, puede ayudar a las organizaciones a tomar decisiones bien pensadas para mejorar la sostenibilidad de las operaciones. Optar por el tanque de almacenamiento adecuado es más que una decisión acertada en la práctica; Es una inversión inteligente en eficiencia, seguridad y sostenibilidad.